Seis días antes de la desaparición de Ezequiel Chávez Adán, el operativo "Lluvia de estrellas" donde participaron la Gendarmería, las Fuerzas Federales y la Científica, iluminó durante la noche y sin previo aviso, las arterias de Iguala en las zonas más violentas del municipio de Iguala.
A pesar de esto, los grupos delincuenciales continuaron con sus operaciones, de hecho, el padre del joven desaparecido recriminó el 1 de diciembre que a pesar de todas las medidas, a plena luz del día sobre la avenida Vicente Guerrero frente al Palacio Municipal, a su hijo Ezequiel de 18 años, lo hubieran secuestrado cuatro hombres durante el trayecto que separaba su casa de la tienda.
Una vecina indicó que los hombres subieron al chico a una camioneta blanca; a 15 minutos del lugar del plagio, los peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) habían estado trabajando más de dos semanas para desenterrar los cadáveres de las fosas.
A Ezequiel Chávez lo levantaron dos meses después de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, el 26 de noviembre, su padre Javier Chávez, abordó un autobús del municipio de Taxco a Iguala, luego de varias horas sin saber de su hijo.
Llegó al cuarto que renta Ezequiel, el cual paga él mediante el dinero que recibe por la venta de yogur, se percató de que su hijo había olvidado su celular, lo cual indicaba para él, que el joven no tenía planeado demorar.
Su padre llegó a la parroquia de San Gerardo, en el centro de Iguala, donde otros familiares de desaparecidos van a solicitar apoyo a las organizaciones civiles y autoridades federales para que les ayuden en su búsqueda.
A más de diez días del secuestro, Javier Chávez ha ido al Ministerio Público de Iguala, a la PGR y a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), lo que más teme es que a su hijo se lo lleven a la sierra a sembrar droga, como se rumora en Guerrero cuando secuestran a jóvenes.
“Espero que mi muchacho regrese para poder cumplir sus sueños”, de acuerdo con su padre, Ezequiel desea ingresar a la Unidad Académica de Ciencias de la Tierra en Taxco, para regresar con su familia y estudiar geología.
Padre se reunirá con autoridades este martes 9 de diciembre
Javier espera que durante la reunión que mantendrá con las autoridades en la parroquia de San Gerardo, se presenten pistas que permitan ubicar con vida al muchacho.
Los familiares de otras víctimas de desaparición, ya no incluyen "encontrar con vida" en los formularios que entregan a las autoridades, se conforman con poder recuperar siquier sus restos entre los 21 cuerpos hallados en las fosas de Iguala.
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